DE CONCIERTO Y AYUDA UMBILICAL
28.03.2021 18:23
Por: José Ignacio Cáceres Serna
Ayer viernes, los raizales brazos del puente “tienditas” acunaron a más de una treintena de músicos, cantantes internacionales, artistas quienes proclamaron con sus voces alas para la libertad, que vibraron reverberando sobre cientos de miles de almas.
Hoy 24 de febrero de 2019 en nuestra cuna fronteriza, se desarrollaron eventos, actos, hechos coyunturales como hace siglos atrás, cuando la historia de hoy se configuraba con acciones políticas libertarias, con la misma presión del Norte, ahora acompañada por miembros representantes de Gobiernos del mismo cono Sur, coño que seguirá pariendo, a más seres desconfigurados por la mismísima saga de ideales doctrinarios, que seguirán empecinándose en empañar las aparentes proyectadas formas de demostración de democracia, pero lo cierto es, que aún seguiremos construyendo aquella quimérica - mitológica bestia.
El presidente usurpador versus el presidente interino, precisamente se confrontan entres los bordes Nortesantandereanos y con las otras cicatrices con Brasil, las preferencias de los esclavos adeptos partidarios y sus aprobaciones a los abusos de unos y los gustos de los otros, miembros de una misma familia distanciadas por las doctrinas antes referidas.
Y seguirá siendo la suprema, voz popular aquella quien acuña y acuna los sangrantes clavos procurados por aquellas decisiones, que a manera de detonaciones de salva, eclosionan en explosiones a mansalva, haciendo brotar de por doquier partes de los templos corporales, rosas con ojos rojos, que dejaran exclamar blancas palomas exploradoras, que ascenderán portando en sus picos, retoños verdes de olivos que por dolor llevarán balsámicos aceites a millares de oficiales y opositores, quienes siempre han existido, solo, que cuando el equilibrio se desvié ocasionado por una carga en los dados de cualquier lado, el collar se rasga, se desgrana la redonda sonrisa de la margarita.
En varias ocasiones Villa del Rosario y Cúcuta abrigaron al llamado libertador, quien huía de su propio hogar, recibido fué, por Francisco de Paula Santander, nombre del puente actual y el otro homónimo del primero por los que paradójicamente se impide ingresar pacíficamente la ayuda del cordón humano umbilical identitario. Pues a más de dos siglos de las descritas correspondientes independencias, habitando, habituando siguen a ambos lados de la imaginaria línea, los descendientes de las mismas familias Colombo Venezolana…
Con mucha vehemencia se vienen tildando, hablando y vociferando en contra de los dos bandos a causa del contrabando, producto de la recia política de los politiqueros, quienes como semovientes reces se oponen, a sus mismas políticas públicas del libre intercambio de formas, usos, costumbres propias y eternas culturales, antes, pertenecientes a las ancestrales etnias prehispánicas “conquistadas”.
Al final, ninguna franja ganará, la sagrada herida del costado sangrará, se cubrirá de costra, sanará, pero cerrar, herrar, la grieta psicológica, moral, cultural, patrimonial, de nuestros hermanos, decenios nos costará, hacia su restauración y reconstrucción.